martes, 25 de febrero de 2014

de malefica a benefica

 

Las drogas son un instrumento

De las clases dominantes para

Mantener oprimidas y temerosas

A las masas adictas subalternas.

F.S.

 

 

Historia de una yerba.

 

La marihuana es una de las plantas más conocidas en todo el mundo, originaria de la península de la india, de ahí su clasificación y nombre científico inicial de cannabis indica o cannabis sativa, traduciéndolo a cáñamo de la india, podría ser pariente del henequén.

Cuadro de texto:  Por sus propiedades toxicas es considerada la hierba más común de todos los tiempos, ya que su producción, uso y consumo se ha extendido por todo el mundo y todas las razas y pueblos.

 

La maléfica ha demostrado que es invencible, pues a pesar de que los Estados Unidos le declararon la guerra en 1922 , cuando fue proscrita del territorio norteamericano, y del mundo cuando USA, logro que la Organización de las Naciones Unidas(ONU) lanzara la campaña contra ella denominada “por un mundo libre de drogas”, penalizando su siembra, producción, transporte, distribución, comercio y consumo con penas que iban y van desde las leves hasta las graves, desde una amonestación pública hasta la pena de muerte dependiendo del país. Entre estos últimos se encuentran Taiwán, Indonesia y otros donde el islam es predominante.

 

De tal suerte ha ganado terreno la maléfica que hoy en día a los 50 años de ser una proscrita; en Holanda y en Uruguay ya está legalizada su producción, venta y consumo, así como en 22 estados de los Estados Unidos ya es despenalizada su posesión y consumo con fines terapéuticos o medicinales, incluyendo dos estado (Colorado y Washington), donde se puede adquirir con fines recreacionales, es decir se puede comprar y fumar la “hierba mala” por puro gusto y placer.

 

Es muy posible que entre este 2014 y el próximo 2015 se sumen otros 6 estados más a aceptar a la maléfica como benéfica, entre ellos se encuentra el Estado de nuestros primos-hermanos, Arizona, que la someterán a consulta popular o plebiscito, donde el pueblo responderá con un sí o un no a la pregunta “¿está de acuerdo en que se legalice la producción, consumo y comercio de la marihuana?”.

 

Cuadro de texto:  Es de esperarse que en la gran mayoría de los Estados donde se consulte, la respuesta sea positiva, pues las encuestas levantadas por distintas firmas, son consistentes en que un poco más del 50% de la población mayor de edad apoya la legalización y despenalización de la marihuana, apoyo que sigue creciendo conforme se acercan las fechas de consulta.

 

A nivel mundial a pesar de las indicaciones de la ONU y de los Estados Unidos, las leyes se han flexibilizado al respecto, ya que la gran mayoría de los países, han despenalizado, su producción o su consumo, no así su comercio.

 

En algunos países a pesar de leyes duras al respecto son bastante permisivos con su consumo y producción, de tal suerte que hasta los flemáticos ingleses son tolerados por las autoridades, la policía públicamente a declarado que no perseguirá ni encarcelara a los  ciudadanos que sorprenda en posesión de la hierba hoy casi benéfica, o los encuentre riéndose a carcajadas bajo los efectos de la misma.

 

Es de llamar la atención que uno de los países con leyes más draconianas al respecto sea nuestro México, territorio, que es la segunda patria de la maléfica, porque aquí nomas, y no por presumir, somos el segundo o tercer productor mundial de marihuana, solo atrás de los Estados Unidos, de Afganistán o de Marruecos; y pues como no, si nuestros primos del norte les fascina juanita “la regañona”, sean blancos, negros, amarillos, cafeces, o pieles rojas, y más o menos 30 millones de primos la fuman, junto con 4 millones aproximadamente en territorio nacional.

Aun y cuando “nuestra patria” a nivel mundial no “pinta” en el consumo de la risueña hierba, si pinta como productor, porque somos proveedores de los primos del norte.

A pesar de que para las estadísticas internas es la droga más común entre la población de todas las clases y categorías sociales, no es un problema de salud pública incontrolable aun.

 

Estos hechos y acontecimientos de los últimos tiempos no han sido fortuitos; para que esta situación de despenalización y de legalización de la “hierba verde y apestosa que fuman los soldados” como nos decían nuestros mayores al referirse a la “juanita”, se esté dando, ha sido posible gracias a los siguientes eventos  que se están presentando:

 

El reconocimiento desde los liderazgos y de los gobiernos de que el enfoque con el cual fue abordado hace poco más de 50 años su prohibición fue y sigue siendo equivocado, pues “el mundo libre de drogas” nunca fue logrado; por el contrario ya no solo hay marihuana, sino que hay una gran diversidad de sustancias viejas y nuevas que ya están en esta categoría. Ahora existen a nivel mundial 300 millones de consumidores habituales, amigos de la juanita. Y otros tantos millones más de consumidores de otras sustancias, muchísimo más peligrosas para la salud.

 

El propio presidente de los Estados Unidos  Barak Obama ha externado recientemente que el fumar “María” la considera un mal habito, como el fumar tabaco o beber alcohol, los cuales deben ser tratados en principio en el seno familiar donde se combaten los malos hábitos, luego en el sistema de salud en lugar de las Cortes Federales. Junto con la determinación del fiscal general de no confrontar a los Estados de Colorado y Washington, por la legalización recreativa que autorizaron, y al parecer considerar a estas dos entidades como laboratorios de prueba a ver cómo funciona la medida, han sonado como la voz arranque para que se desarrolle u intenso debate al respecto que eventualmente conducirá a la legalización recreativa del consumo.

 

Por otra parte considerado como mercado, que desde hace mucho tiempo el capitalismo lo creó, transformándolo en una mercancía que satisface una necesidad social muy poderosa como lo es el esparcimiento, y estimulado por las enormes ganancias que este negocio produce, se ha convertido en una potente fuerza que empuja a la burguesía y al empresariado legal por tomar una tajada de este pastel que según estimaciones de la agencia antidrogas (DEA), ronda los cien mil millones de dólares anuales, solo en el mercado de los Estados Unidos, y que lo único que se lo impide es la legislación prohibicionista.

 

Al darse a conocer que el Estado de Colorado, estima un mercado de mil 200 millones de dólares por ventas anuales de marihuana recreativa, al cual le descontara el 25 % de impuestos estatales, tanto el gobierno, federal y los locales, lo ven como el nuevo motor que pondrá de pie a la economía estadounidense, que ya acumula 6 o 7 años que no puede retomar la senda del crecimiento sostenido. Creándose un sector que algunos empresarios ya lo saborean como de ganancias extraordinarias, y el gobierno de ingresos fiscales que mucha falta les hace dada la reticencia de los congresos federal y los locales a crear o aumentar  impuestos a los contribuyentes cautivos.

 

Uno de los dispensarios de Colorado ya registro 150 patentes de subproductos derivados y patento 6 variedades de semillas, solo con permiso para comerciar marihuana medicinal, imaginen lo que será cuando se desplome el muro legal.

 

Los descubrimientos recientes de que el sistema de justicia en los Estados Unidos, viola los derechos humanos de las minorías, según se ha quejado el propio Barak Obama, pues las cárceles están llenas de consumidores de la maléfica, especialmente de negros y latinos, que reciben penas 3 o 4 veces más altas que las que reciben los consumidores blancos, visibilizándose una tendencia oculta por mucho tiempo. Donde  las autoridades arrestan poco más de 800 mil personas al año, por delitos relacionados con las drogas y el 87% es procesado y sentenciado por ser usuario o consumidor de las mismas. Dejando casi intocados a los verdaderos empresarios del crimen.

 

Se sabe que el Gobierno está agotado en esta lucha o guerra, que al parecer no puede ganar, y cada año canaliza más y más recursos a las dependencias que se encargan de hacer cumplir la ley. Y la legalización, despenalización  y regulación, liberara recursos crecientes para destinarlos a otras acciones que al gobierno le urge realizar como invertir más en educación, generación de empleos, en salud pública, etc.

 

Los países que más incautan y decomisan marihuana por año son los Estados Unidos y México, lo cual no ha servido de nada, pues ni el consumo ha bajado, ni la oferta a disminuido, aun y cuando verdaderos ejércitos a ambos lados de la frontera mexico-usa, están dedicados las 24 horas del día, los 365 días del año a combatirla, por lo que la maléfica va triunfando.

 

 

 

Esto, es suficiente para superar los efectos que sobre la salud de las personas pudiese tener  el supuesto aumento en el consumo de la hierba maléfica. Podremos ver a las personas bien marihuanas en los centros de reunión, departiendo con sus amigos, medio atontados, riendo como locos, comiendo como pelones de hospicio, se podrá investigar en los propios hospitales que tanto afecta a las mentes de los consumidores, las 400 substancias que contiene la maléfica además de la principal que es la que mas “pone”, dicen que tiene un gran futuro en el mercado de los fármacos como analgésico potente y como tranquilizante, que son las reacciones ya probadas.

 

En fin.


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soy como el clavo, que aun viejo y oxidado, sigue siendo clavo