VIENTOS DEL SUR
Por Adelaido López
En la cuarta asamblea nacional del PRI, se dieron cita políticos de la vieja guardia que le dieron la sustancia y folklor a las truculentas elecciones de antaño que hacía este partido político, creado y formado como la secretaría electoral del estado mexicano.
La verdad a estos políticos se les observó con mayor coraje y empuje en las deliberaciones de su reunión, tal vez añorando las bondades que representaba estar en el pináculo del poder político y económico en sus estados y en el país.
Manuel, el Meme, Garza, Antonio Riva Palacio, Gustavo Carvajal Moreno, Adolfo Lugo Verduzco, Joaquín Gamboa Pascoe, Cosío Vidaurri, entre otros líderes del viejo partido de estado, estuvieron en la tertulia presenciando la poca participación que tuvieron los delegados efectivos y que dejaron de lado, sin siquiera tocar el tema, de su posición ideológica en la vida política nacional.
Aún y cuando este partido forma parte de la Internacional Socialista y se ha distinguido por los principios de la socialdemocracia, la mayoría de los delegados no entendieron su pertenencia a estas corrientes de pensamiento, ya que siguen actuando como si sus postulados fueran de un partido de centro derecha, incluso sin recordar su nacionalismo revolucionario o bien su liberalismo social.
Por ello su indefinición ideológica se combinó entre lo viejo y lo nuevo de sus liderazgos, como lo demostró la delegación de Sonora con sus cuadros que asistieron a la ciudad de México: Bulmaro Pacheco, Gilberto Otero, Guadalupe Silva, Daniel Liera, Rogelio Díaz Brown, Juan Leyva Mendivil y Carlos Daniel Fernández, entre otros.
Carlos Armando Biebrich Torres, ex gobernador de Sonora y responsable del Consejo Técnico de Asuntos Políticos del Consejo Político Nacional, encargado por la Comisión Organizadora de la Cuarta Asamblea Nacional Extraordinaria del PRI, para la reforma de los estatutos, no tuvo la menor intención de estar en el lugar correspondiente a la delegación sonorense. Prefirió ver desde la barrera, agazapado, las impugnaciones que hacían a su documento los enviados del gobernador Bours.
José Encarnación Alfaro Cázarez, de la oficina del gobernador en el DF, fue el indicado del dirigente estatal del PRI, Ernesto de Lucas, para procesar la réplica que ganaron en la víspera pero que finalmente optaron por no impugnar aún y cuando la votación les había sido favorable.
La asamblea sólo sirvió para atestiguar la asunción de la nueva dirigencia priísta de Beatriz Paredes y Jesús Murillo Káram, y para que los viejos y nuevos dirigentes partidistas de los estados tuvieran también su reencuentro, pensando, claro sobre su futurismo, como el que se avecina en Hermosillo.
En ese partido que acaba de recuperar la presidencia municipal, que había perdido en 1997, ya se manejan varios nombres como sus cartas a un puesto de elección popular: Epifanio Salido, Javier Gutiérrez, Daniel Hidalgo, Manuel Ignacio Acosta y Claudia Pavlovich Arellano. De entre ellos saldrá su candidato a la alcaldía, por elección interna o por encuestas previas.
Sin embargo los del PRI no la tienen muy segura, ya que si el waterloo de la ex presidenta y hoy directora del INEA, María Dolores del Río, fue la falta de agua potable en las colonias populares de la capital, la inseguridad y los ajustes de cuentas, sería del boursismo.
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ser como el clavo, que que aun oxidado, sigue siendo clavo.
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