domingo, 2 de marzo de 2008

EQUIVOCANDO EL DEBATE

Isabel Dorado Auz 

"Estamos abiertos al diálogo, a las opiniones, a dar más información y  desde luego es muy importante que las fracciones del Congreso local y los regidores opinen en contra, a favor, en aportación y se den coincidencias. Hay un punto a diferencia, que es fundamental, en el sentido de si se pueden ó no trasplantar árboles" (Ernesto Gándara, Termómetro). 

Hay que insistir una vez más, el debate real es si se necesita destruir un parque o no para llevar a cabo el proyecto MUSAS. Por que si no se retoma así, estamos acudiendo a un diálogo de sordos donde necesariamente una de las partes saldrá perdiendo y el resultado de la polarización en torno al Parque Villa de Seris, traerá como consecuencia el enfrentamiento entre la ciudadanía que quiere frenar acciones arbitrarias y los que dicen gobernar con las mayorías.

Hasta donde el berrinche de un político, en este caso el gobernador, puede más que el interés general por preservar ese importante pulmón que no solo beneficia a los vecinos del Parque, sino a todos los que por necesidad tenemos que visitar esa área para llevar a cabo trámites burocráticos o, como se pretende, asistamos a los eventos culturales que habrán de realizarse.

Cuando la cultura ecológica dejó de tener menos importancia que el capricho de Eduardo Bours por demostrar que solo él sabe lo que los hermosillenses queremos.

Habrá que ver también si el Partido Acción Nacional es tan perverso como para dejar crecer el descontento, para finalmente negociar en lo oscurito algunas prebendas de parte del gobierno, ya que a excepción de un par de regidores y un diputado federal, la estructura panista a lo más que ha llegado es a firmar un documento donde se exhorta al diálogo, mismo que en la práctica puede decirse que no ha existido. Será que una vez más la dupla prianista decide darle la espalda a los hermosillenses y, en conjunto, se preparan para destruir el Parque.

Que dirán nuestros "ilustres" representantes perredistas. Harán realidad el señalamiento de que están vendidos al gobierno priista y, en consecuencia, la nueva izquierda avalará este atropello a la ecología hermosillense. Les importará el mandato del Comité Ejecutivo Estatal para que la regidora Dorotea Rascón no avale el uso de cambio de suelo, mismo que solo cuenta con 15 votos a favor y necesita 16. Lo cual quiere decir, que de avalarse la destrucción del Parque será responsabilidad de quienes representan la "oposición" en el municipio. En tal sentido, solo por dignidad el PRD debiera no avalar esta iniciativa y si el PAN quiere seguir siendo comparsa, allá ellos.

Finalmente, esta toma de decisiones también pondrá a prueba el nivel de organización de la ciudadanía. Se demostrará si la incipiente organización de los defensores del parque alcanza para resistir el embate de los poderes fácticos de Sonora o será un capítulo más de lucha en el largo aprendizaje de ir construyendo una sociedad más justa. Una sociedad, donde el debate de las ideas sirva para encontrar las mejores soluciones y no sean una comparsa para avalar los apetitos destructivos de quienes quieren enriquecerse aún a costa de su propia salud. Del estudio de impacto ambiental y del proceso de compraventa de los terrenos no hablemos, no es prioridad de este gobierno la transparencia informativa, y en eso nos están quedando a deber nuestros ilustres medios de comunicación.


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Fernando V. Ochoa
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